Mis apuntes

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AULA PT CC.SOCIALES EMPRENDEDORES

Medición del tiempo histórico


 

Medición del tiempo histórico


Se utilizan varias unidades de medida del tiempo que abarcan períodos de diferente duración. Las más frecuentes son las siguientes:
  • Año: 365 días.
  • Lustro: 5 años.
  • Década: 10 años.
  • Siglo: 100 años.
  • Milenio: 1.000 años.


Para medir etapas históricas o leer libros de historia se debe saber a qué siglo corresponden los diferentes años, y resulta una técnica sencilla cuando se conocen sus secretos. Lo más importante es saber que el siglo I comienza en el año 1 d.C. y que dura hasta el año 100 d.C. A partir de ahí todos los demás siglos son consecutivos:
  • Siglo III, del año 201 al año 300.
  • Siglo XI, del año 1001 al año 1100.
  • Siglo XX, del año 1901 al año 2000.
  • Siglo XXI, del año 2001 al 2100.


Para saber a qué siglo corresponde una fecha determinada se observa la cifra correspondiente a las centenas y se le suma 1. 

Esta táctica no sirve para los años terminados en «00». En ellos la cifra o cifras que preceden a los dos ceros indican el siglo. Así, el año 100 pertenece al siglo 1, y el año 2000 al siglo XX.



La era cristiana


No todas las sociedades parcelan y miden el tiempo de la misma forma. Cada cultura o civilización cuenta el tiempo tomando como referencia un acontecimiento que considera fundamental.

Por ejemplo, los romanos contaban el tiempo a partir del año de la fundación de Roma y nosotros lo hacemos a partir del nacimiento de Jesucristo, que es el año 1 de la era cristiana. Por eso se dice que los años posteriores son años después de Cristo (d.C.) y los anteriores son años antes de Cristo (a.C.).

Es muy importante recordar que el límite entre las dos eras es el año 1, año en que nació Jesucristo, y que no existe el año 0. Por tanto, se pasa directamente del año 1 a.C. al año 1 d.C. Tampoco existió un siglo 0, por lo que se salta del siglo I a.C. al siglo I d.C.

Los musulmanes, en cambio, empezaron a contar los años a partir del momento en que Mahoma, el profeta del islam, escapó de la ciudad de La Meca para difundir su doctrina, que se corresponde con el año 622 de nuestra era.

Aunque existen diferentes formas de medir el tiempo dependiendo de la cultura, en la actualidad la datación de los años basada en la era cristiana es la más extendida, y es la que utiliza la mayoría de los organismos internacionales.


FUENTES HISTÓRICAS
Los arqueólogos y los historiadores son los encargados de investigar el pasado del ser humano. Los arqueólogos analizan sobre todo los restos materiales de la vida cotidiana (cerámicas, herramientas, enterramientos, etc.) y, por ello, son los encargados de investigar las primeras etapas históricas en las que los documentos escritos son más escasos. Los historiadores se dedican al estudio de los acontecimientos y procesos, y analizan tipos de fuentes muy diversas.
  • Tipos de fuentes. Los historiadores estudian vestigios de diverso tipo para conocer el pasado: documentos escritos sobre cualquier material (piedra, papel, pergamino, papiro…), restos artísticos, útiles cotidianos, testimonios orales, etc.
  • Uso de las fuentes. El trabajo con documentos escritos es muy problemático: hay que descifrar el idioma en el que están escritos, completar con otras fuentes los datos que faltan, comparar fuentes contradictorias entre sí, etc.

Los historiadores necesitan ser muy precisos y, sobre todo, tener un gran espíritu crítico, pues las fuentes históricas pueden estar manipuladas: muchos gobernantes han utilizado la literatura y el arte para su propia propaganda o se han trucado muchas fotografías.

Por ello, los historiadores deben comprobar la autenticidad de la fuente, tomar sus datos relevantes, conocer su origen para poder interpretarla bien y comparar los datos que se extraen de ese documento con los obtenidos de otras fuentes.

CLASIFICACIÓN DE LAS FUENTES HISTÓRICAS